De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, Live And Let Die es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.
Este logo combina las formas geométricas sin que ello le reste movilidad y ligereza, el resultado es elegante pero fresco.
Live And Let Die cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
Live And Let Die basa su éxito en la fuerza de su gama cromática que rompe el espacio convirtiéndose en protagonista.
El logo Live And Let Die está ejecutado con tanta precisión que no resultará jamás un problema colocarlo.