Este logo es producto de las innovaciones tecnológicas que caracterizan el siglo pasado y que tanto han influido en el arte, es hijo y representante de su tiempo.
Muestra ideal para ejemplificar las bases gráficas que sustentan un logotipo bien hecho.
Este logo combina las formas geométricas sin que ello le reste movilidad y ligereza, el resultado es elegante pero fresco.
La belleza de este logotipo se basa en la justa importancia de sus vacíos dentro del cuerpo de la forma.
De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, Istanbul 2008 es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.
Istanbul 2008 es una perfecta muestra de cómo un logotipo se convierte en imagen inconfundible de su marca.
Excelente logo equilibrado pero contundente de línea clara.