De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, Eurovision Song Contest 1999 es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.
Eurovision Song Contest 1999 cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
Se distingue por su extremado buen equilibrio, unido a originalidad y excelencia formal.
El logo Eurovision Song Contest 1999 está ejecutado con tanta precisión que no resultará jamás un problema colocarlo.
Eurovision Song Contest 1999 es una perfecta muestra de cómo un logotipo se convierte en imagen inconfundible de su marca.
La belleza de este logotipo se basa en la justa importancia de sus vacíos dentro del cuerpo de la forma.