De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, SmithKline Beecham es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.
SmithKline Beecham es una perfecta muestra de cómo un logotipo se convierte en imagen inconfundible de su marca.
SmithKline Beecham cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
Muestra ideal para ejemplificar las bases gráficas que sustentan un logotipo bien hecho.
Este logo es producto de las innovaciones tecnológicas que caracterizan el siglo pasado y que tanto han influido en el arte, es hijo y representante de su tiempo.